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miércoles, 20 de marzo de 2013

Las lecciones que nos dejó el Meteorito de Rusia.



Si analizamos detenidamente el video (que es verdadero) donde se ve una Nave Intergaláctica de los Maestros de la Cosmogonía Universal (Llamadas OVNIS por los hombres terrícolas) en el acto de destruir al Meteorito de Rusia, podemos obtener las siguientes conclusiones:
1°.- Que las Naves Intergalácticas procedentes de Civilizaciones Superiores del Universo, existen y por lo tanto, existe el Divino Padre Creador, que Es el Único Dios Vivo Eterno y Existente, que todo lo ve y todo lo sabe, que Es el Creador y Constructor del Universo Infinito y Maravilloso, Obra Perfecta de Sus Manos. El Es el Autor Divino de las Leyes Sabias y Perfectas que rigen el devenir del Universo y su eterna transformación.
2°.- Que estas Naves, tripuladas por Seres Inteligentes y Sabios, progresados espiritualmente, obedecen al Superior Espíritu del Plano, que es el Divino Padre Creador, Quien gobierna a todos los Mundos y seres que los pueblan. Todos los Espíritus Progresados de los Mundos Superiores, son ejecutores de la Voluntad Divina y obran sólo por Su Mandato Omnipotente.
3°.- Que esta Nave fragmentó al meteorito antes que éste chocara con la Tierra, evitando así una catástrofe mundial de dimensiones apocalípticas, pues aún no es el tiempo que el Creador Divino ha designado para el Fin de la humanidad terrestre. Ese Momento fatal habrá de llegar solo en el día y hora que Él lo determine.
4°.- Que la precisión matemática con que fue realizada esta maniobra, por los Tripulantes de la Nave, demuestra un avance científico y tecnológico que se encuentra a distancia sideral, de la ciencia y tecnología de los hombres de la Tierra.
5°.- Estas Naves Intergalácticas están en otra dimensión, no visible a nuestros ojos terrenos. Ellos pasan a voluntad a nuestra dimensión visible. En el video se aprecia como la Nave aparece segundos antes de embestir al asteroide, luego lo impacta, atravesando y fragmentando al cuerpo celeste, y después de un corto trayecto, desaparece a nuestros ojos, por haber regresado a la dimensión invisible.
6°.- El video demuestra que las Naves Intergalácticas son indestructibles. Esto echa por tierra el cúmulo de mentiras sobre Naves estrelladas, cadáveres de extraterrestres, abducciones, raptos, películas de ciencia ficción, etc.
7°.- La presencia de Naves Intergalácticas en los cielos de nuestro planeta Tierra, lo reiteramos, significa que ya estamos en el Fin del Final del Apocalipsis. Por lo tanto, todos los habitantes de la Tierra deberían hacer un examen de conciencia para enmendar rumbos, rechazando el Mal, la Violencia y la Locura colectiva que hoy envuelve a la humanidad, y se dediquen a buscar a Dios y Su Justicia, que todo lo demás les será dado por añadidura. Por lo tanto el hombre debe respetar las Leyes Divinas, actuando siempre con obras de justicia. Y la Justicia consiste en dar a cada cual lo que es debido: Al justo, protegerlo y ayudarlo. Y al impío, rechazarlo.
Recordemos lo que está escrito en los Libros Sagrados: En el Juicio Final, llegará el Divino Maestro Jesús, el Mesías, con sus Ángeles y dará a cada cual según sus obras: Los justos brillarán como el sol en el Reino de Su Padre y los impíos perecerán en el fuego de la destrucción.
“Gloria al Divino Padre Creador en las alturas y paz en la Tierra a los hombres de buena voluntad.”
Agregamos una nueva conclusión, de Charles Bolden Administrador de la NASA, en el diario LA NACION.CL

martes, 5 de marzo de 2013

El Meteorito de Rusia: ¡Una Nave de los Ángeles salvó a la Tierra!

        


Este video (Los Maestros de la Cosmogonía nos han revelado que el video es verdadero) nos muestra una visión telescópica del meteorito que va cayendo sobre la Tierra, donde se ve a una Nave Intergaláctica de los Maestros de la Cosmogonía (Los Ángeles y Arcángeles de la Biblia) que por Mandato del Padre Divino, embiste al meteorito y lo atraviesa fragmentándolo, con lo que salvó a la Tierra de una gran catástrofe. Si este bólido celeste hubiera impactado entero en la Tierra, se habría producido un cataclismo mundial de consecuencias imprevisibles.
El diario La Segunda del 15 de febrero de 2013 dice: (Resumen) “Gran Meteorito cayó en el centro de Rusia. Mil personas resultaron heridas.”…”Bautizado como “Bólido de Cheliábinsk” – ya que en ese lugar de los Urales impactó hoy el aerolito --, el cuerpo celeste ingresó a la atmósfera terrestre a 30 kilómetros por segundo y su onda expansiva fue tan potente, que se sintió hasta en el vecino Kayajistán.”…”más de 3.000 edificios residenciales dañados por el cuerpo celeste.” “Hubo pánico.” “Se encontraron cráteres hasta de seis metros en el área, probablemente generados por el impacto de los fragmentos.”
El choque de asteroides contra la Tierra ha ocurrido muchas veces en la historia geológica de nuestro planeta. Uno de los casos mejor estudiados es el del Asteroide de Chicxolub: Hace 65 millones de años, un asteroide de 10 kilómetros de diámetro impactó a la Tierra en la península de Yucatán, a una velocidad de 25 kilómetros por segundo, elevando la temperatura de la atmósfera hasta 500° C. Se cree que el impacto de este asteroide generó una explosión con una potencia de 50 megatones, que fue 2 millones de veces más potente que la Bomba del Zar, (Bomba de Hidrógeno) el dispositivo más poderoso creado por el hombre  jamás detonado. Además causó grandes cataclismos mundiales: tsunamis con olas de 1 kilómetro de altura, incendios que abarcaron más del 70% delos continentes, fuertes vientos, lluvias torrenciales, huracanes, terremotos. Se formó una densa nube que envolvió al planeta por meses o años, lo que produjo un “Invierno Nuclear.” Desaparecieron muchas especies animales y vegetales y causó la extinción de los dinosaurios, dando fin al período geológico llamado Cretácico, con lo que comenzó un nuevo período, el Terciario.
Con la Gracia de Dios, hemos recibido la Revelación de los Maestros, que el Divino Padre Creador mandó a sus Ángeles a fragmentar al meteorito de Rusia, porque aún no es el Tiempo que el Supremo Hacedor ha prescrito para el Fin de la Humanidad.
Pero precisamente será un asteroide gigante el que al chocar con la Tierra, producirá el Día Final. Madrecita Laura Antonia lo profetizó: (16 de noviembre de 1973, Semitrance: “Asteroide llegará a la Tierra: Será “El Final.” Asteroide se aproxima a la Tierra. Producirá graves trastornos en nuestro planeta. La temperatura máxima se elevará a más de 500°, por sobre el nivel máximo actual.”
Ahora veamos la coincidencia con la Profecía de Juan Apóstol, que relata el momento Final de la humanidad, con el choque del Asteroide, que él llama “Pedrisco.” (Libro Apocalipsis de Juan Apóstol, Cap.16, vs. 17): “Y el Séptimo Ángel derramó su Copa por el aire, y salió una grande Voz del Templo desde el Trono” (de Dios) “que decía: Esto es hecho.
18 Y fueron hechos relámpagos, y voces, y truenos, y hubo un grande temblor de tierra tal, y tan grande terremoto, cual nunca fue, desde que los hombres fueron sobre la Tierra.” (El terremoto final de la humanidad).
“19 Y la ciudad grande” (Roma) “fue partida en tres partes, y cayeron las ciudades de las gentes, y Babilonia la Grande” (La humanidad impía) “vino en memoria delante de Dios, para darle el Cáliz del vino de la indignación de Su Ira.
20 Y toda isla huyó y los montes no fueron hallados.
21 Y cayó del cielo UN GRANDE PEDRISCO” (El asteroide que chocará con la Tierra) “sobre los hombres, como un talento” (Esta frase es una tergiversación) “y los hombres denostaron a Dios por las plaga del PEDRISCO, que fue grande en extremo.” (Fin de la cita).
Finalmente veamos una noticia aparecida en Internet, en BBC Mundo, Ciencia, del 24 de julio de 2002: Esta noticia nos dice que un asteroide de unos dos kilómetros de diámetro, podría impactar contra la Tierra el 1° de febrero de 2019 con magnitudes catastróficas, como destruir un continente entero, según cálculos astronómicos conocidos.
El NT7 como es ahora conocido el asteroide, fue visto por primera vez el 5 de julio de 2002, desde un observatorio de Nuevo México, al Sur de Estados Unidos y según estudios preliminares de su órbita, está en curso para chocar con la Tierra a una velocidad de 28 kilómetros por segundo, suficiente para destruir un continente entero y causar cambios climáticos globales.
¡Todo está sujeto a la Voluntad Omnipotente del Divino Padre Creador!
“Gloria al Divino Padre Creador en las alturas y paz en la Tierra a los hombres de buena voluntad.”