El 27 de marzo pasado, los hermanos de nuestra Congregación religiosa celebramos con gran alegría y fe, el "Día del Divino Padre Creador", instituido por nuestra Madrecita Laura Antonia el 27 de marzo de 1984, en el Templo de La Pintana.
Este Día Sagrado que por Mandato Divino debían celebrar todas las religiones de la Tierra, por el momento fue conmemorado en forma privada por nuestra religión, empezando en la mañana del día 25 con una obra de amor hacia nuestros hermanitos menores, los perritos albergados en nuestro Templo, atendiéndolos en forma especial, bañándolos, limpiando sus jaulas y sobre todo dándoles cariño y atención. El día 27 se realizó un almuerzo de hermandad en el Templo, con la asistencia de todos los hermanos y familiares. En la tarde, se representó un acto artístico musical como parte del homenaje al nuestro amadísimo Padre Creador, que se inició con un emotivo discurso del hermano Arzobispo Carlo Opazo, dirigido a nuestro Creador Divino. Seguidamente nuestra Presidenta Arzobispo Ivonne Valdés, expresó sentidas palabras exhortando a los hermanos a seguir adelante en la senda señalada por Madrecita Laura Antonia.
Luego se inició el acto artístico, con la participación de los hermanitos más pequeñitos, en un hermoso coro infantil, interpretando dos hermosas canciones compuestas especialmente para el Padre Divino. A continuación, los hermanos de la Juventud representaron divertidas escenas de la obra de Miguel de Cervantes, "Don Quijote de la Mancha".
Seguidamente tres hermanas representaron el momento Sagrado en que fue fundada nuestra Congregación por un Maestro de la Cosmogonía, que tomó materia en Madrecita Laura Antonia, el 2 de octubre de 1967 en Santiago de Chile, quedado así fundada nuestra religión por Mandato Divino. Luego de varios simpáticos actos, los hermanaos de la Juventud de la Congregación, culminaron la presentación artística con la recreación de tres conmovedoras escenas de la vida y obra profética de nuestro Divino Maestro Jesús, el Mesías, extraídas de pasajes de los Evangelio del Nuevo Testamento.
A la hora del té, la Hermana Presidenta con su hija Francisca partieron la torta. Luego a las 21 horas, todos los hermanos vistieron la túnica blanca para elevar cánticos y oraciones al Divino Padre Creador. Al finalizar la Cadena de Oración, los hermanos comieron pan de miel, en recuerdo del "Maná" con que el Divino Padre nos alimentó cuando estábamos reencarnados en el Éxodo del antiguo pueblo de Israel desde Egipto, guiados por el Profeta Moisés.
A las 22 horas todos los hermanos se retiraron a sus hogares, felices de haber cumplido con el Homenaje debido al Ser Supremo Todopoderoso Creador, que nos ha dado el ser y la vida y que ha creado el Universo Infinito y Maravilloso, Obra Perfecta de Sus manos.
Discurso de Monseñor Carlos Opazo Barragán en el Día del
Divino Padre Creador
27 de marzo de 2016. En
el Templo de la Pintana.
“Gloria al Divino Padre Creador en las alturas y paz en la
Tierra a los hombres de buena voluntad”
Amadísimo Divino Padre Creador:
Intentaré con mis humildes
palabras, interpretar el sentir de mis hermanos todos de la Congregación
Espiritual de la Nueva Jerusalén, en este Día Único y Solemne, donde veneramos
en forma especial la existencia de nuestro Bienhechor, Padre Divino y Dueño y
señor de la pequeña grey, parte de la progenie Bendita de Yahvé.
Por su Divina Voluntad, todos sin
excepción hemos nacido en esta actual reencarnación, sencillos e ignorantes,
para que nuestros espíritus pudieran recibir con avidez y sin trabas materiales,
la Luz diáfana y maravillosa que emana de Ti, Oh Supremo Hacedor Todopoderoso.
Está escrito que, con lágrimas y
sangre, hemos sido merecedores de recibir ahora en Justicia, la Verdad más
pura, en esta Hora Suprema donde próximo está el Día Final de la humanidad.
Es cierto que por la puerta que
abrió Madrecita Laura Antonia con su amor y sufrimiento, la oscuridad en que
vivíamos se iluminó con la Luz Divina que penetró a raudales en nuestros
espíritus y que hoy nuestra amada Maestra Francisca mantiene firmemente abierta
por Tu Mandato; gracias a lo cual seguimos recibiendo el Tesoro más grande que
puede poseer hombre o mujer sobre la tierra, cual es la Verdad sublime e
incomparable de la Ciencia Espiritual que emana directamente de Tu Mente Divina,
Oh amadísimo Divino Padre Creador.
Esta Luz de la Única Verdad del
Universo, nos sigue llegando merced al amor y sacrificio de nuestro amado y
recordado Divino Maestro Jesús, cuya palabra cálida y llena de amor, está
grabada con trazos indelebles en nuestros corazones. También vayan nuestros más
preciados sentimientos de gratitud a nuestros amados, venerados y siempre
admirados Maestros de la Cosmogonía Universal que nos guían, nos enseñan y
protegen en todo instante.
En este día Sagrado, como tus
hijos sumisos y obedientes, con unción y reverencia, te ofrendamos hasta el
último átomo de fe y del más puro amor de que son capaces nuestros pobres
corazones y con plena conciencia de nuestros espíritus en la Luz, recibe Oh,
Señor Todopoderoso, nuestras humildes palabras que hoy se elevan a Ti, para
agradecer tu Bondad y Misericordia Infinitas hacia tus hijos que hoy te veneran
con adoración, Oh Señor, Rey del Universo Infinito y Maravilloso, Obra
Perfecta de Tus Manos.
En este Tu Día Sagrado, Padre
amadísimo, te reiteramos unánimemente en nuestros espíritus y corazones,
nuestro amor incondicional para Ti, Oh Señor y también a toda tu Corte
Celestial.
Recibe Señor nuestro y Padre
Misericordioso, de parte de todos tus siervos presentes, hombres, mujeres,
jóvenes, ancianos, niños y bebés, animalitos, avecitas, árboles y plantitas de
Tu Templo Sagrado, nuestro unánime amor, expresado en nuestras modestas obras
de insignificantes criaturas terrenas, ofreciéndote nuestra vida física si
fuese necesario para Ti, amadísimo Señor.
Divino Padre Creador: En este Día
Maravilloso, te expresamos todos tus siervos fieles, que tenemos el ferviente
deseo que ojalá estas obras nos permitan ganar el Reino de los Cielos, para
seguir sirviéndote y amándote más allá de esta vida terrena, en Tu Reino que es
lo más Bello y Perfecto que existe, por todos los siglos de los siglos, amén.
Gloria al Divino Padre Creador en las alturas y paz a los hombres de buena voluntad, así sea.